Balenciaga concluye su licencia de gafas con Marcolin y se alía con Kering Eyewear

Balenciaga ha finalizado su contrato de licencia de gafas con Marcolin y ha elegido a Kering Eyewear como su aliado en la producción y distribución global de sus líneas de gafas y gafas de sol. La primera colección producida por Kering Eyewear para Balenciaga será la de la primera-verano de 2019 y estará disponible en puntos de venta seleccionados a partir de enero de 2019.

Este es el fin de la colaboración entre la casa parisina y Marcolin, “a quien queremos agradecer la valiosa contribución que ha aportado al desarrollo de nuestra marca en los últimos años”, ha indicado Cédric Charbit, CEO de Balenciaga. El acuerdo de licencia entre Marcolin y Balenciaga se firmó en 2012 con una validez de cinco años.

Con esta operación, Kering Eyewear, división fundada por el grupo francés en 2014, lleva a su terreno a la última marca propiedad de François-Henri Pinault dedicada al negocio de las gafas, que aún no estaba bajo su tutela.

A partir de hoy, Kering Eyewear cuenta con un catálogo de 15 marcas, entre las que se encuentran Gucci, Cartier, Bottega Veneta, Saint Laurent, Alexander McQueen, Stella McCartney, Brioni, Altuzarra, Alaïa, Boucheron, Pomellato, Puma, McQ, Christopher Kane y Tomas Maier.

La casa de lujo parisina fue fundada por Cristóbal Balenciaga en 1917 y, en octubre de 2015, nombró al georgiano Demna Gvasalia como su director creativo. Balenciaga será la cuarta marca del grupo Kering, tras Gucci, Bottega Veneta y Saint Laurent, “en alcanzar los mil millones de euros de ingresos”, dijo François-Henri Pinault el pasado febrero en la publicación de los resultados anuales del conglomerado de lujo.

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