El gigante suizo del lujo Richemont, propietario de la casa de joyería Cartier, anunció el viernes unas ventas anuales récord, con un aumento del 19 %, hasta superar los 19 900 millones de euros, gracias a la recuperación de Asia en los tres últimos meses del año.

Para su ejercicio 2022/2023 (que finaliza el 31 de marzo), su beneficio neto anual cayó un 86 %, hasta 301 millones de euros, debido a la operación con Farfetch para su negocio minorista online, dijo el grupo en un comunicado, aunque afirmó que el beneficio aumentó un 60 % para el negocio retenido, hasta 3900 millones de euros.

Las ventas anuales de la empresa superaron con creces las expectativas, pero el impacto de la operación con Farfetch fue mucho mayor de lo previsto. En comparación, los analistas encuestados por la agencia suiza AWP esperaban una media de 19 500 millones de euros en ventas, pero 640 millones en beneficios.

Su crecimiento durante el año se vio impulsado por Europa, donde las ventas aumentaron un 31 % sin tener en cuenta los efectos de las divisas, gracias al regreso de los turistas, pero también a la fuerte demanda local.

Pero las ventas también repuntaron con fuerza en China, Hong Kong y Macao en los tres últimos meses del año, tras el levantamiento de las restricciones sanitarias. Sus ventas en Asia-Pacífico cerraron el año con un simbólico aumento del 1 % en moneda local gracias a esta recuperación en China, tras la caída registrada en los nueve meses anteriores.

Para el año que viene, Johann Rupert, su presidente, afirmó en el comunicado que "se espera que la volatilidad económica y la incertidumbre política sigan afectando al entorno empresarial".

No obstante, se mostró convencido de que el grupo está bien posicionado para hacer frente a la demanda, "impulsada en particular por la significativa recuperación de los viajeros chinos".