Crece el negocio de las prendas de control en Colombia

Por:

Tamara Gonzalez Litman

Publicado el
14 nov. 2017

Las fajas y las prendas de control con sello made in Colombia se cotizan como una extensión de la ropa íntima y han logrado ventas récord en 2017. Según cifras oficiales reveladas por ProColombia esta semana, al corte del primer semestre del año, las exportaciones de esta familia de productos registraron envíos por valor de 24,5 millones de dólares, un 9,18% más que el mismo periodo del año anterior. El consumo local, por su parte, ha crecido un 39% en los últimos 5 años. 

Las exportaciones de las prendas de control registraron ventas por valor de 45,1 millones de dólares al cierre del año 2016 y se estima que en 2017 la cifra llegue a los 50 millones de dólares, con un alza interanual por encima del 10%. La industria que nació por la necesidad de atender la demanda local se ha convertido en una nueva línea de producto para importantes marcas en el país, como es el caso de Leonisa y Anne Chery, especialistas en ropa íntima. 

Estados Unidos, México y Chile son los principales compradores internacionales de estos productos colombianos y, gracias a la participación en ferias internacionales como mode city en París, las marcas del sector de prendas íntimas de Colombia ha logrado aumentar la demanda europea, que hoy ya responde por un 8% del total de las exportaciones. “Más allá de controlar o moldear la figura, nuestras prendas cumplen propósitos que mejoran la calidad de vida de las personas, como nuestros body sujetador con espacio para prótesis que alivian a las mujeres con masectomías”, informó Claudia Rojas, representante de Fajas Inc.  

Las telas inteligentes con beneficios para la salud como hidratación de la piel y mejora en la circulación, otorgan el valor agregado a estas prendas locales que ahora se comercializan con éxito en los Emiratos Árabes, Rusia y España. El negocio de las prendas de control mueve en Colombia más de 1 billón de pesos al año con márgenes brutos de utilidad por encima del 30%. Emplea a más de 35.000 personas y ha demostrado ser inmune a la inestabilidad que atraviesa la industria textil en el país.